En épocas dónde está tan de moda opinar en las redes sociales, muchos piden que vuelva la educación con mano dura, violencia y golpes de parte de los padres a fin de educar mejor a sus hijos. Así que compartimos dos infografías que remiten justamente a lo contrario, a que Pegarle a un niño NO funciona para su educación, sino que es algo violento y contraproducente.
Pegarle a un niño NO funciona para su educación
Los niños que son golpeados en el futuro llegan a mostrar con frecuencia depresión, ansiedad, uso de drogas y agresividad. Cuanto más son golpeados, más golpearán a otros, incluyendo a sus amigos y sus hermanos. Cuando llegan a su adultez es más posible que golpeen a su pareja.
El secreto no es solamente que pegarles no funciona para educar, sino que es totalmente innecesario. Cuando los niños son criados con expectativas apropiadas a su edad y acompañados de una gran cuota de empatía, tienden a ser cooperatios.
Si crees que porque a ti te golpearon resultaste buena persona, no fue por los golpes. Pudiste haber sido aún mejor si no te hubieran pegado.
La frase más común en quienes abogan por el retorno de la mano dura hacia los infantes, utilizan la expresión "una nalgada a tiempo enseña que...". Pues bien, tomando esa misma expresión, esta imagen ennumera justamente qué es lo que enseñan los golpes a los niños.
Lo que enseña una nalgada
Una nalgada a tiempo enseña que solo se le puede pegar a los más débiles. Que para la próxima me tengo que esconder mejor. Que más vale decir mentiras. Que no puedo tener voluntad ni iniciativa, ni hoy ni cuando crezca, que los que te aman te lastiman, que el amor debe doler, de mamá, de papá, de una novia, marido o esposa.
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