¿Será que has llegado demasiado pronto? O quizá ¿Demasiado tarde? Es complicado, porque ya no te esperaba, sin embargo una pequeña parte de mí no se cerraba a la posibilidad de que un día reaparecieras y volviera a sentir tus cálidos besos. ¿Y si acaso has llegado justo a tiempo? No eres perfecto, ni yo tampoco y aunque suene loco eso me agrada.
“El amor sin libertad dura lo que un estornudo” Una frase de una canción que en lo particular me gusta mucho, si bien lo he dicho antes, jamás te pediría que te quedes a mi lado (aunque desee hacerlo) ni tampoco te diré te necesito, pues ya soy una persona completa. Si quieres partir lejos hazlo, adquiere anécdotas, conocimiento, disfruta de la vida (con libertad y no con libertinaje) ríete a cada segundo si es posible.
“Si me gustaste por ser libre ¿Quién soy yo para cambiarlo?” Por ello te quiero libre, pero… Conmigo… Quizá sea complicado de entender, siempre me han dicho que soy una persona complicada, que a veces no se me entiende lo que quiero decir con exactitud, por ello es que trataré de explicarte de la manera más sencilla posible; Quiero que con toda libertad me platiques de esas anécdotas que hayas o has tenido con tus amigos, esas anécdotas donde quizá los tragos se te han escapado de las manos, o si alguna chica te ha guiñado el ojo o mejor aún si tú se lo has guiñado a ella, existe una probabilidad de un 99.9% que como de costumbre quiera desterrarte metafóricamente, pero el 00.01% que queda es la parte que te abraza literalmente, porque al final estarás siendo honesto conmigo y con honestidad, para mí siempre es más fácil resolver las cosas.
No tengo esa necesidad de saber de ti a toda hora del día con mensajes de texto o llamadas telefónicas, sencillamente porque yo tengo deberes que realizar y tú también, hazlo únicamente si te nace, si quieres contarme algo nuevo o solo porque extrañas hablar conmigo.
El amor y la convivencia no son tan complicados, somos nosotros, los seres humanos que no sabemos amar sin tocarnos, sin tenernos, ni poseernos. ¿Por qué decir eres mío? ¿Por qué decir eres mía? ¿No suena mucho mejor decir somos nuestros? Soy de las personas que prefieren mil veces calidad y no cantidad ¿De que nos serviría estar todo el tiempo juntos si es por compromiso? Una vez leí una reflexión que contaba sobre una tribu de indios, un par de enamorados que fueron a pedir ayuda al viejo brujo porque tenían miedo de que algún día se les acabará el amor y se separan, hicieron muchas cosas para obtener el conjuro que los ataría para siempre (claro que es mejor si se lee completa) en fin, de toda la reflexión lo que más me gustó fue la lección final del viejo brujo “Vuelen juntos pero jamás atados”. Si algo he aprendido con los años es que no es necesario decir “Te amo” todo el tiempo, a veces por repetirla tantas veces pierde su verdadero significado, prefiero que mis besos, mis abrazos y mis caricias sean quien te lo digan.
Y si arqueada la ceja y te preguntas que ¿Por qué te quiero o para que? Simple, te quiero para reír, para que me molestes como frecuentemente sueles hacerlo, para escapar, para hacer locuras, para apoyarnos, para refugiarme cuando no deseo saber nada del mundo, te quiero libre pero conmigo, sin falsas máscaras, te quiero tal cual, imperfecto, loco, tan carente de todo un poco pero finalmente tuyo, genuino y compartiéndote conmigo. Y si he de pedir algo a cambio, pediría que por favor no intentaras cambiar mi forma de ser o pensar, pero que si que me orilles a ser mejor, que me corrijas y que cuando me caiga me ayudes a levantarme. Quiero que hagamos el amor en los lugares donde me sorprendan tus ganas, ser tan niña y tan mujer al mismo tiempo, que me despiertes en medio de la noche y me sorprendas de vez en cuando, que hablemos de todos nuestros sueños aunque algunos de estos los realicemos por separado, motivarte y alentarte a continuar ante todo pronóstico de ir tras cada uno de ellos. Que me conozcas en cada una de mis peores facetas, perder la vergüenza y la timidez (que tú sabes que es mucha), que me conozcas desnuda y sin maquillaje, que veas mi ocaso, mi caos y mi decadencia, perder el miedo a mostrarte lo que muchas veces oculto, hacer contigo lo que jamás he querido hacer con nadie. Quiero que me hagas extrañarte y desearte, que nos enfademos únicamente con la recompensa de reconciliarnos de la mejor manera posible. Que logremos expresarnos todo aquello que comúnmente se calla y por ello se termina asfixiado con las palabras. Pido sinceridad y ser tan directos como podamos, no dejando de lado el tacto.
No, no quiero un amor perfecto, eso no existe, sin embargo quiero una relación complicada (que oveja tan estúpida), llena de anécdotas, no quiero caer en rutinas, ni en monotonías, nos quiero libres pero queriéndonos compartir a ratos. Y es que todo es más sencillo cuando se entiende que nadie le pertenece a nadie y que eso es una de las partes más maravillosas de vivir, ser autentico y de uno mismo pero de vez en cuando compartirse, que el amor inicia con chispazo y de la misma forma puede terminar.
Ni el amor es una jaula, ni la libertad es estar solo. El amor es la libertad de volar acompañado. Es dejar ser sin poseer.
Te quiero tuyo, pero conmigo, porque el amor sin libertad dura lo que un estornudo y yo, yo te quisiera en mi futuro…
Autora : Rogue M.
0 comments:
Publicar un comentario